miércoles, 2 de octubre de 2013

Canción para el ratón Pérez


4 comentarios:

  1. Todo lo que vio el piojo por su pequeño ojo fue al Ratón Pérez siguiendo la flecha del dibujo abajo. Pero se despistó porque arriba la canción entera le pareció otra flecha, gorda, con forma de rodaballo y en dirección contraria.

    No importó mucho. Al poco rato, lo que también vio el piojo por su pequeño ojo y por la ventana fue que llovía. Pero no caían gotas de agua sino dientes. Aquella lluvia, menos a los dentistas, asustaba a todo el mundo.

    Menos mal que lo que, por último, vio el ojo del piojo fue al Ratón Pérez provocando otra lluvia ya no de dientes sino de millones y millones de monedas de un euro sobre la cesta del gato. La cesta, por el peso, rompió la mesa, y la mesa el piso, y el piso el barrio, y el barrio la ciudad y la ciudad el país y, por fin, el país rompió el planeta, que empezó a crujir bastante. En las olas mejor preparadas del mar, la Tierra entera empezó a hundirse para siempre.

    Pero no pasó nada porque bebiendo un poquito de leche en el mismo plato, el gato y el piojo siguieron siendo siempre muy amigos.

    AVEZ-VOUS COMPRIS?

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  2. El ratón, el piojo y el gato hicieron una apuesta a ver quién era capaz de aprenderse la canción, pero por mucho que lo intentaron ninguno lo consiguió. En tu caso no hay problema, ya que tienes la memoria de un elefante. Así que puedes muy bien aprenderte esta poesía, tan bonita, que te dejo aquí. También acumulativa, se parece un poco a la que le regalaste al ratón recogedientes.

    Se titula, "La plaza tiene una torre", y es de Antonio Machado.

    LA plaza tiene una torre,
    la torre tiene un balcón,
    el balcón tiene una dama,
    la dama una blanca flor.
    Ha pasado un caballero
    -¡ quién sabe por qué pasó !-,
    y se ha llevado la plaza,
    con su torre y su balcón,
    con su balcón y su dama,
    su dama y su blanca flor.

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  3. Ya me lo he aprendido.Ha resultado muy fácil. Un beso.

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